COMO LA PRIMERA VEZ.

SIEMPRE CON EL MISMO GUSTITO, COMO DEBUTAR UNA Y OTRA VEZ, ESA SENSACIÓN UNICA DE SABER QUE SE VA A DISFRUTAR. LOS ULTIMOS 4 EMPATES DEJARON UN GUSTO RARO EN LOS PALADARES ROJOS, PERO LA CONFIANZA ANTE EL HIJO DE SIEMPRE NO SE PIERDE NUNCA.
COMO EN 1907, EN ESE NACIMIENTO YA CENTENARIO DE ESTA ETERNA PATERNIDAD, EL GRAN ROSENDO LE PONIA CIFRAS DEFINITIVAS AL PRIMER CLASICO DE AVELLANEDA 3-2. EN ESTA OPORTUNIDAD PUSINERI LE ABRIO LAS PUERTAS A OTRO TRIUNFO CLASICO EN OTRO BARRIO PERO CON EL MISMO SABOR QUE TIENEN EN AVELLANEDA, NUÑEZ, MAR DEL PLATA, MENDOZA O SALTA.
HIJOS NUESTROS SIEMPRE Y EN TODO LUGAR.


NOTA SOBRE EL PRIMER CLASICO:
Tras el partido, Carbone (presidente de ra sin) ofreció unos pesos para "reconsiderar su inicial ofrecimiento de ceder los puntos y tomar el partido como amistoso dados los perjuicios que esta derrota le producía a su club, hablándole de la conveniencia de una buena relación de vecindad y haciéndole saber que el referee estaba de acuerdo en hacer figurar en las planillas la entrega de puntos". Estas intimidades las contó Juan Manuel Deluchi, jugador de Racing y testigo presencial, al diario El Telégrafo el 30 de diciembre de 1926. Delucchi aseguró que Degiorgi remató su negativa con esta frase: "Han rechazado desairadamente nuestro sincero ofrecimiento, así que este triunfo es el fruto de la justicia y nada más. No hay arreglo posible".